martes, 21 de octubre de 2008

Miramos al cielo

Tumbados sobre el cesped, sudando y riendo, miramos al cielo.

Miramos al cielo todos a una. Veintidós corazones latiendo al ritmo de fútbol, estiran y comentan el partido que acaban de jugar.

Una hora antes, estamos dejando en el vestuario el paciente hipertenso de la cuarta izquierda, el niño de la UCI, el tratamiento de la octagenaria diabética y la fractura de fémur de Urgencias. En el vestuario se mezcla todo eso con saludos, abrazos, bromas y una misma pasión. El fútbol.


Esta hora supone un oasis emocional en medio de la semana: martes y jueves, que son los días en que nos reunimos. Os hablo del equipo de fútbol de la Arrixaca, mi hospital. Un equipo que, con sus virtudes y defectos, tiene una constancia impresionante. No hay día que no juguemos. Llueva, haga frío, caigan rayos, se pueda freir un huevo en la portería...Da igual. Es admirable el amor por el balón que corre a lo largo y ancho de este equipo. Los que somos más mediocres y no hemos tenido la suerte de tener el balón enganchado al pie, como si de velcro se tratase, aprendemos día a día en este aula, mirando al cesped, para acabar mirando el cielo azul de Murcia.

Y, muchas veces, muchísimas, te ríes (interiormente) con los comentarios que parecen salidos de una Cátedra de fútbol de todos mis compañeros. Sal del fuera de juego. Ese es tuyo. Salta a por el balón. Venga, arriba.

Llevo 2 años yendo a jugar los Juegos Olímpicos de la Medicina y de la Salud. El año pasado en Marruecos (Agadir) y este año en Alemania (Garmisch-Partenkirchen). Y ha sido una experiencia tremenda. Convivir con todos ellos, todo el día, hacer excursiones y jugar el torneo de fútbol 11 y fútbol 7, supone sentirse un afortunado.

Y soy un afortunado por tener estos compañeros de equipo. Que lo mismo te curan un resfriado que te hacen un caño, con el mismo arte.


1 comentario:

Paul Spleen dijo...

Dios, es el mejor vídeo que he visto en mucho tiempo. ¡Angelete Cósmico es un crack! ;o)