jueves, 31 de diciembre de 2009

Uvas


Leyendo este año de 2009, con sus doce meses, me parece que puedo decir que a pesar de las crisis económicas, ambientales y demás, ha sido un buen año para Mari y para mí.

Esperemos que el 2010 nos traiga y os traiga todas esas expectativas cumplidas que tanto deseais. Y que seais muy felices. Feliz 2010.

lunes, 28 de diciembre de 2009

Vuelta al trabajo

Es raro. En estos días, la gente suele comentar lo bien que se está de vacaciones. O lo bueno que estuvo el pavo el día de Navidad. O las pocas ganas de volver a trabajar después de Reyes...

Yo no. Yo he vuelto hoy al trabajo, de pleno. Hoy estoy de guardia, nuevamente, tras el período de rotación tan productivo en Madrid, de los últimos dos meses. De guardia en mi hospital.

He de agradecer en estas líneas el trato tan afectuoso que he recibido en Madrid, en primer lugar de mi prima Isabel y su buhardilla tan coqueta en La Latina. Además el gran Manolo, que ha sido un acompañante perfecto en esos partidos del Vicente Calderón con todo el frío del mundo. Y por supuesto, Ramón, Raquel y Sergio. Las tardes de domingo en el Lamiak se han enterado de que hay carnavales en Cádiz, porque allí hemos cantado todo lo cantable, con golpeo de nudillos en el mostrador, como Dios manda.

Hemos estado en Cádiz en Nochebuena y ha sido muy agradable volver a pasar una nochebuena con la familia después de dos años sin estar allí. Además, nos hemos visto las dos familias, la de Mari y la mía, juntas en esa noche.

Ahora se plantean unas navidades tranquilas, de alguna guardia suelta y poco más. Tras este descanso de Enero, vendrán Montpellier y Memphis. Dos ciudades muy distintas y con expectativas profesionales diferentes. Ojalá pueda aprovechar el tiempo lo mejor posible y traerme una fuente de conocimientos inconmensurable de estos dos sitios.

Pero lo más importante, como siempre, es la ilusión en los niños y en la Cirugía Pediátrica. Ese es el verdadero motor.

De postre, os dejo con esta foto que me ha mandado mi prima Inma. Aún tengo el vago recuerdo de las navidades en esa calle Nueva que ya hemos mencionado en este blog alguna vez.

lunes, 30 de noviembre de 2009

La trastienda

La trastienda del Carnaval, es una página web creada por un gaditano amante del carnaval. La página está curradísima con fotos y comentarios de todos los momentos que el carnaval de Cádiz implica.
Y tiene su buen trabajito el hacer dicha "güeb", puesto que el autor se ha ido paseando por todos y cada uno de los locales de ensayo de las agrupaciones. Coros, chirigotas, comparsas y cuartetos, aparecen reflejadas en esa página, en su ambiente más íntimo. En la fábrica de coplas. Donde se fraguan muchas de las letrillas que después he acabado cantando aquí en Madrid con otros buenos gaditanos.
Cuando veo las caras de felicidad de los que aparecen en esos ensayos, me imagino algún día trabajando en Cádiz y pudiendo acudir a este tipo de eventos. Para cantar y echar un buen rato con gente que le guste la música y reirse. De momento, los compromisos profesionales no me permiten (en un futuro a corto plazo), salir "en el Falla"... Además este año, ni siquiera podré sacar el romancero con Sergio, puesto que estaré fuera en Carnavales. En fin, me quedará de consuelo mirar las caras de la gente en www.latrastiendadelcarnaval.com.

domingo, 22 de noviembre de 2009

El regreso


Por fin. He encontrado el ratito que estaba buscando desde hace tiempo y lo he encontrado. Hoy domingo, estoy en la buhardilla de mi prima en Madrid, en pleno barrio de La Latina. Se escucha por la ventana el bullicio de la gente allí abajo en el rastro.

Han sido algo más de 2 meses sin escribir nada de nada. Probablemente no haya encontrado tiempo para sentarme en mi piedra cuadrá o también será que esto de estar en Madrid, altera los ritmos circadianos de todo buen cristiano. Por otro lado, el portátil también se estropeó hace un par de semanas y ahora que está arreglado, pues apetece más todavía contar cosas.

En estos dos meses que no os he escrito, he estado en Madrid, completando mi formación en Cirugía Pediátrica y disfrutando con los estupendos colegas de profesión que hay aquí y que se están portando muy bien conmigo.

De todas formas, echo de menos también el trabajo "normal" y "real" mío de todos los días, en la Arrixaca. Pero bueno, ahora toca disfrutar de estos momentos, para abrir los ojos a otros sitios, a otras formas de hacer las cosas.

Aquí os dejo una fotito de lo que se ve por la ventana...


viernes, 18 de septiembre de 2009

Tarde de toros

Pues eso. Ayer Mari y yo nos fuimos a La Condomina, a ver a los diestros Morantes de la Puebla, Talavante y Daniel Luque. Los toros, de Domecq, ni fú ni fá. Lo mejor, fue la luz que hubo para hacer fotografías. Aquí os dejo unas pocas.






























jueves, 17 de septiembre de 2009

Besos

No hay nada más bonito en el mundo que un beso. Ni nada que me de más coraje, que la gente que pone la cara cuando los da. En vez de poner los labios.
Besar a alguien o a algo, es dejar algo de tí en la otra persona. Sobre todo si en el beso, van las babas, como es el caso de los niños.
Un beso activa las feromonas, activa los músculos y te hace sentir bien. Te da confianza, te da alegría. Un beso, puede ser una bienvenida. O puede ser una despedida. Por un tiempo. O para siempre.
El Boston Globe, nos deja "un montón de besos", como han titulado el post con el que nos dan idea, de cuántos tipos de besos pueden reflejar estas fotografías.
http://www.boston.com/bigpicture/2009/09/a_collection_of_kisses.html
Por cierto, un beso (de caballero) a Patrick Swayze. Cuántas veces (más de dos veces, seguro) vimos mis hermanos y yo, Dirty Dancing, en el MULTICINES NUEVO, gratis, gracias a papá.













Así pues, id y besaos los unos a los otros.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

El cumpleaños

Mañana cumple un añito.

Y es mi niña chiquitita. En este año, me ha hecho muy feliz. Me ha dado momentos para pensar y ganas de contaros cosas en algunos meses. En otras ocasiones, no tantas.

Y vosotros habéis contribuido a que hoy esté aquí, con vuestros comentarios, vuestras felicitaciones, vuestra alegría y vuestras ganas de compartir.

Recuerdo la tarde (en Apartamur) que me dio por crearla. No sabía ni qué poner ni qué decir. Y poco a poco, con el ánimo de todos y mi empeño, ha salido de La Caleta para llegar a los rincones más recónditos de este mundo. Hasta Kazajistán, sin ir más lejos.

Su belleza es sin igual. Un atardecer contemplándola no es suficiente. Hay que estar ahí. Por eso este fin de semana iré a Cádiz, me pondré lo más cerca que pueda de ella y le gritaré, GRACIAS.

Felicidades, Mi piedra cuadrá, por cumplir tu primer año.

martes, 1 de septiembre de 2009

Nessun dorma

Luciano Pavarotti falleció hace un par de años. Pero no fue hasta ayer que vi este maravilloso video del "Nessun dorma" de la Ópera "Turandot" de Puccini.
El video es de 1982, pero cabe destacar que este gachón no cogía aire para soltar la armoniosa receta de la lírica por su boca. Y el estruendo en aplausos del final, unido a su cara de satisfacción, ponen la carne de gallina. Disfrutadlo.


lunes, 31 de agosto de 2009

El último día de las vacaciones

Es inevitable pasar por este trago. Aunque, sinceramente, ha sido un verano muy diferente. Primero tuve unas vacaciones generosas, para irme a Argentina con mi mujer y luego vinieron Julio y Agosto, que hemos trabajado bastante. Salvo estos maravillosos 15 últimos días que primero estuvimos en Portugal (Salamanca-Oporto-Lisboa-Sevilla) y luego en Ibiza navegando a bordo del grandioso velero "Beluga".
Os dejo un par de imágenes bonitas de estos días. Una, en Oporto. La otra, en Ibiza. Ya he cambiado también el cabecero del blog, adelantando el primer cumpleaños de LA PIEDRA CUADRÁ, que será el próximo día 12 de septiembre.

Mañana, vuelta al trabajo.



domingo, 30 de agosto de 2009

La resurrección

Recuerdo aquella tarde del mes de Junio de hace un año. En mi casa, Javi, Irene, Mari y yo, escuchábamos por radio lo que sería un amargo trance para el cadismo. Abraham Paz fallaba un penalti a falta de un minuto y el Cádiz, tras una temporada aziaga, se hundía en las aguas de segunda B. Por segunda vez.
Ha sido un año maravilloso, éste, viendo como el Cádiz ganaba partido sí y partido también. Y al final, degustar el maravilloso ascenso (mi hermano se acordará que nos enteramos de todo esto, debajo de un paso...).
Pues bien, hoy comenzamos la andadura por Segunda División, con un equipo que me simpatiza mucho. La U. D. Salamanca. Hace unos días estuve en esa tierra tan maravillosa y contemplando su Plaza Mayor, nos lo pasamos fenomenal.
Ya sólo me queda dejaros con este corto realizado por aficionados cadistas, como campaña "extraoficial" de captación de socios. Una perla. No dejéis de verlo.

sábado, 22 de agosto de 2009

A beautiful day

Queridos todos. Después de una semanita "sufriendo" por el país vecino, Portugal, a base de cerdo con almejas y buen bacalao, me dispongo a escribiros pues he sufrido un colapso con uno de los emails que me ha llegado en mi ausencia.
Se trata de un músico rumano llamado Tom Boxer. Hace música COOL y la verdad, el tema titulado A BEAUTIFUL DAY, está bien, suena bonito. Pero más bonito sonará cuando veais el video. ¿A dónde se habrá ido el gachón éste a rodar su videoclip?
Pues a dónde va a ser. A la ciudad donde se viven muchos y variados "beautiful days".
Un abrazo.

martes, 11 de agosto de 2009

Andaluces, levantaos

Hoy se cumplen 73 años del asesinato de Blas Infante, a cargo de miembros de la Falange.

Blas Infante fue el padre de la Patria Andaluza. No me gusta mucho a mí, el rollito de los nacionalismos y las zanahorias en vinagre; pero creo que es justo honrar la memoria del que murió por decir que "Andalucía era diferente del resto de España".

Y a decir verdad que lo es. No tenemos un idioma diferente, ni tenemos tantos privilegios como otras comunidades (también las hay que tienen menos aún), pero tenemos la chispa justa para vivir todos los días como si fueran el último.

Hace unos años, Juan Carlos Aragón, insigne autor de carnavales de Cádiz, escribió esto. Espero que os guste.

viernes, 24 de julio de 2009

Cincuenta y dos grados

Llevamos 4 años y pico aquí en Murcia.
Nunca. Nunca en esos cuatro años, hemos pasado tanto calor como ayer. Fue acojonante. Salir de la piscina y tener la sensación de estar frente a un calefactor.
Viento caliente y una sensación de quemazón que subía del suelo hacia arriba.
Tengo amigos por aquí que dijeron ver termómetros con 52ºC o como éste del periódico LA VERDAD, con 56 ºC.


Yo ¿qué queréis que os diga? Que arreglen el cambio climático pero ya. Esto es insoportable. O por lo menos, que haga más calor en Cádiz, para que así podamos estar empatados en grados Farenheit.
Menos mal que Manolo García, canta esta noche en Calasparra y allí estaremos para invocar al DIOS DE LA LLUVIA.

lunes, 29 de junio de 2009

Panorámica Perito Moreno

Aquí os dejo esta instantánea, compuesta de 5 fotos que hice en el Glaciar Perito Moreno, Argentina.
Podéis verla a más resolución, en el apartado FOTOS.
Espero que os guste.

martes, 23 de junio de 2009

Cámaras digitales

De vez en cuando recuerdo coger el album de fotos de la boda de mis padres y echarle un vistazo. Ahora, evidentemente, lo hago menos, puesto que no estoy viviendo allí.
Es emocionante, ver las fotos de ellos, hace casi 50 años (dentro de unos pocos añitos harán las bodas de oro), allí, en el altar de la Iglesia de Santa María de Guadalupe, en Algar. Caras desconocidas, otras juveniles, otras desaparecidas ya. Envases de fanta naranja obsoletos y que ahora valdrían una pasta en cualquier subasta de antigüedades.
La pena, que son fotos contadas. Caben en un album y no hacían falta más. De viaje de novios, se fueron a Madrid y existe una sola foto. Enamorados, alegres, en la puerta de un bar. Mi madre, guapísima, jovencísima y agarrada a su brazo, son testimonio de un amor que dura casi medio siglo. Y esa única foto, lo refleja.
Lo que os venía a contar hoy, es que gracias a las cámaras digitales y de los móviles, puedo disfrutar de miles (literalmente) de fotografías y ver cosas que el día de la boda, no pude ver.
Me gustaría en estas líneas agradecer la presencia de los que hicisteis un esfuerzo generoso de tiempo y distancia, por venir, por ejemplo desde Burgos, Barcelona, Madrid, Sevilla, Algar, y por supuesto, no podía ser menos, de Murcia. Gracias a todos. Ahora, ya tranquilos y sin los nervios y la emoción de aquel día, vemos los videos, las fotos, divertidas y simbólicas. Nos damos cuenta de que realmente lo pasásteis muy bien. Como muestra, un botón.
Yo sabía que me había entrado arroz en la boca, al salir de la iglesia, pero no que alguien había hecho una instantánea del momento.

Tampoco recuerdo el buen día que nos hizo y la neblina que se apoderó, ya en la noche, de La Caleta (y consecuentemente, de la piedra cuadrá, que tan cerquita teníamos ese día).


No sabía qué cantidad de arroz y papelillos se podían tirar en la puerta de los Salesianos, que dicho sea de paso, nos rogaron encarecidamente no tirar el primer elemento gastronómico, puesto que había octogenarias que, en repetidas ocasiones, besaban el suelo, gracias a estos gestos de amistad eufórica.


Y por último, me quedo con esta imagen, que es extraordinaria, testigo fiel de la mezcla del buen tiempo que nos hizo, el vino de la tierra y la cervecita, que no nos falte. Creo que la hizo M. J. Sánchez, a la cual doy las gracias desde aquí, por tan preciada reliquia de ese día.


lunes, 15 de junio de 2009

El regreso


Tiene Andrés Calamaro un disco en directo, después de 6 años de no tocar en su propio país, que se llama EL REGRESO.

Nuestro regreso particular está marcado por "cheking-out", es decir, a la hora que te están largando del hotel, que aquí lo típico es que sea a las diez u once de la mañana...Nos hemos puesto a caminar por Buenos Aires, sin ton ni son. Y hemos llegado al CAFÉ TORTONI, un café con mucha historia, por donde han discurrido muchos famosos poetas de este país y del extranjero.

Hemos caminado por la gigante avenida 9 de julio (es una de las más anchas del mundo), con su monolito en el centro, símbolo patriótico de este país.
Un país, que si os digo la verdad, me ha impresionado por sus paisajes, y por sus gentes. Igual os digo que la gente del sur, de la Patagonia, es muy humilde y son "gente de pueblo", para entendernos, la gente de Buenos Aires es bien distinta. Como buenos urbanitas, aquí cada uno va a lo suyo y ya está. Si eres español, te huelen antes de que hables y te están intentando dar "coba", en cuanto pueden. Aquí la gente se cree que somos ricos o algo parecido. Las propinas son muy importantes para su sustento económico. Y los taxistas son muy espabilaos. Y sinceramente, Buenos Aires, no es mi Buenos Aires querido. Tiene el encanto de cualquier ciudad española y está hecha a base de "imitaciones" de ciudades europeas.
Pero eso sí, si venís, tenés que probar las carnes de CABAÑA LAS LILAS. Es uno de los restaurantes más caros de la capital. Puedes comer muy muy muy bien por 30€ (vino incluído), que en España serían unos 80€ fácilmente. El trato ahí, es excepcional y tiene unas vistas muy bonitas al Puerto Madero.
Esta noche, cuando a las 21.00 h. (las 2:00 h. de la madrugada allí), cojamos nuestro avión, rumbo Barajas, aparte de estar acojonado (como siempre que me monto en un avión), estaré feliz por haber podido conocer la riqueza y variedad de este bonito y maltratado país.

sábado, 13 de junio de 2009

Caminito


En Boca todo es diferente al resto de Buenos Aires.
Buenos Aires respira humo y coches. Respira turismo y mar. Rio de la Plata (perdon que no ponga acentos, es que este ordenador no me deja...).
Pero dentro de Bs. As. hay un lugar realmente difernente: La Boca.
"En una villa nacio, fue deseo de Dios, jugar y sobrevivir con afan de ganarse a cada paso, la vida tal vez jugando pudiera, a su familia ayudar, nacio la mano de Dios"
Cantaba el Potro Rodrigo. Y realmente, llegas a la Boca y te sorprende. Sorprenden la pobreza literal (hay mogollon de chabolas) y la pasion con que se vive el futbol y todo lo que rodea a "El Diego". El estadio de Boca, La Bombonera, es bastante mas feo que el Carranza por fuera. Alli todo es pasional. Tienen propaganda de Coca Cola, pero la tienen en blanco y negro, por no poner el rojo que es el color del eterno rival, River Plate.
Pinturas aqui y alla, de vivos colores. Las casas, la mayoria infravivienda, albergaban (como en el casco antiguo de Cadiz), a varias familias. Hasta 5 personas en un cuarto. Por eso le llamaban a esos "patios de vecino", Conventillos. Todo lo comparten. Como en los conventos. Y las fachadas, pintadas en mil colores, no por nada, sino porque se aprovechaba la pintura sobrante de las quillas de los barcos, que daban para pintar, un cachito.
Y si a algo huele tambien, Bs. As., es a tango. Anoche tuvimos la ocasion de ver un espectaculo en directo de tango y da gusto ver a esas mujeres mover las piernas como si fueran de trapo. Los pies se entremezclan en un ambiente de nostalgia, de aquellos millones de inmigrantes que llenaron este pais y dieron "aires" diferentes a esta capital.

Guaraníes


No tienen nada que ver con los indígenas que se reían de Robert de Niro en LA MISIÓN, cuando éste ascendía por una pendiente en plena selva. Los guaraníes viven al margen de la civilización en dos reservas creadas para su supervivencia. No obstante se les ve por el pueblo. Por el Puerto Iguazú, vendiendo artesanía en madera y objetos que sólo ellos sabrán para qué sirven. Visten con harapos y van descalzos y despeinados. Nada tienen que ver con las pinturas y el taparrabo de la película.

De cualquier forma, Iguazú es un punto realmente diferente a todo lo que habíamos visto. Es absolutamente verde. Con la tierra roja y una humedad del 100%. Y allí se rodó la mayoría de las escenas exteriores de La Misión, allá por el año 1985.

Las cataratas son muy bonitas. Ayer las vimos, por la mañana del lado argentino y por la tarde, del brasileño.

Y hoy hemos llegado a Buenos Aires. Era viernes al mediodía y las calles estaban repletas de gente saliendo, entrando, yendo y viniendo. Esta noche vamos al espectáculo de tango argentino con cena que la agencia nos contrató y mañana iremos a ver El Fantasma de la Ópera.

Ya va quedando menos para volver...

martes, 9 de junio de 2009

Ballenas



Nuevamente la suerte quiso acompañarnos ayer y hoy. Os cuento. El día de ayer comenzó bien temprano. A las 8 de la mañana pasó a recogernos nuestro guía, Juan. Este hombre aparte de ser un buen tipo, ha sido un guía excelente. Para empezar nos llevó a la Playa de El Doradillo, al amanecer, para poder disfrutar de las ballenas con las primeras luces del día. Nunca vi una ballena salir del agua, pero os cuento que es un espectáculo alucinante. Mari y yo, sólos en la playa, y desde la arena, a unos 50 metros, comienza el show. Una mancha negra que sale unos centímetros, para a continuación sacar todo el lomo y respirar echando una bocanada de aire y agua, varios metros hacia arriba.


Nos quedamos embobados y Juan nos llamó para seguir el viaje. Recogimos a una pareja de Barcelona con los que también hemos congeniado durante el viaje, en Puerto Pirámide. Y desde aquí, en coche, por caminos de "ripio" que llaman ellos (aquí son caminos de tierra y grava), una hora hasta la Caleta Valdés, donde disfrutamos de ver los lobos marinos a una distancia de unos 200 metros.


A la vuelta, comimos en Puerto Pirámide: bife de chorizo con una ensaladita (algo verde hay que comer). Y nos montamos en la embarcación que nos llevó al avistamiento, en plena Bahía de la Península Valdés. El show continuó y las ballenas salían a la superficie, a escasos centímetros de la embarcación, curioseando y realizando el típico avistaje de "homo sapiens". Es increíble que criaturas tan enormes, salgan tan pacíficamente a la superficie, para asomar su gigante ojo y volver a sumergirse. Daban la vuelta y volvían a curiosearnos. Y nosotros a ellas. Estábamos como niños asomados a la barca, hablándoles, intentando acariciarlas. A lo lejos, algunas, hacían ejercicios pre-parto y daban saltos, enseñando la cola.


No puedo describiros aquí en unas líneas lo que sentimos ayer. Juan, que vio nuestra cara de asombro por la mañana, nos volvió a dejar un rato más al caer el sol en Playa Doradillo, para acabar el fantástico día. Una ballena adulta con su cría, navegaban a pocos metros de la orilla, tranquilos, ajenos a nuestras bocas abiertas y a nuestra emoción.


Hoy, hemos vuelto (necesariamente) a El Doradillo y hemos continuado viendo apareamientos y enseñanzas de madre a hijo (en las ballenas, los pantalones los llevan las hembras, nada que ver con otras especies...). Más tarde, Juan, nos ha bajado a Punta Ninfa, una cala debajo de un gran desfiladero de arena y piedra, donde hemos podido acariciar (un poquito) y comer, junto con los elefantes marinos. Han sido 2 horas de intensas emociones naturísticas.


Mañana en la mañana saldremos para Iguazú, provincia de Misiones. Ya os seguiré contando. Besos y abrazos.

domingo, 7 de junio de 2009

Les Eclaireurs


El Faro Les Eclaireurs, es mal llamado el Faro del Fin del Mundo. El auténtico Faro del Fin del Mundo está situado en la Isla de los Estados, un poco más al Este.
No importa. Para nosotros, fue la navegación más al Sur que hemos (y que habremos, probablemente) tenido en nuestra vida.
Ayer por la mañana, visitamos el Parque Nacional Tierra de Fuego, vimos asentamientos de algunas cabañas de indios y algunas castoreras. No sé si sabéis que le llaman Tierra del Fuego porque cuando Magallanes y el resto de hombres con dos huevos, que navegaron hasta aquí en el siglo XVI, lo primero que vieron desde lejos fue muchos hilillos de humo. Y es que todos los indios de por aquí, encendían antorchitas con las que cobijarse del frío, a pesar de que ellos de manera congénita tienen un grado centígrado más que cualquiera de nosotros, como adaptación al medio. Así se le llamó primeramente, Tierra de los Fuegos, y luego se singularizó a "Del Fuego".
Por la tarde, navegamos el canal de Beagle hasta la isla de los Pájaros, la isla de los Lobos (son lobos marinos, que nunca los había visto más cerca...ni en el National Geographic) y el faro Les Eclaireurs. Realmente impresionante.
Por la noche comimos en el restaurante local, El Turco, a 15 euros por cabeza: una pizza familiar, un bife de chorizo con patatas fritas y huevo y su postre. De vino, por fin probamos el famoso latitud 33º. Un vino de la provincia de Mendoza, con mucha publicidad, pero no demasiado espectacular.
Y lo mejor del día: ver que en el último lugar del mundo, en pleno parque natural, hay construida una pequeña ermita de madera a...María Auxiliadora!!! A Mari y a mí, nos impresionó encontrarnos con esta sorpresa allí en medio de montañas nevadas y lagos congelados. No ahí mi estupefacción que por la tarde-noche, cuando salimos por la avenida principal, veo a un montón de jóvenes quinceañeros saliendo de una especie de colegio con una iglesia al lado...Los Salesianos de Ushuaia. Al parecer desde hace muchos años han tenido una gran presencia aquí. Y hay una calle de Don Bosco.
Este mediodía volaremos a la Península Valdés. Un abrazo.

sábado, 6 de junio de 2009

El Petiso Orejudo

El vuelo fue bien. Llegamos a Ushuaia a la hora prevista. Ahora sí, el aeropuerto es pa verlo. Una pista de aterrizaje en medio del mar...y nada más. Mari no podía DE creérselo.
El hotel Tierra de Fuego donde estamos está muy céntrico y con buenos servicios. Lo mejor es el recepcionista, llamado Daniel y asturiano. Sus padres y familia son todos asturianos y él mismo nació en un pueblo cerca de Navia. Nos contó varios sitios para ir a comer a buen precio y lo que debíamos ver.
Y por la tarde, aprovechamos y fuimos al Museo de Ushuaia. El museo está emplazado sobre la antigua cárcel-presidio de reincidentes. Para sintetizar: a finales del diecinueve, Argentina se peleó con Chile sobre a quién correspondía la isla de Ushuaia. Bien, Argentina sostuvo que como ellos tenían más población a la que albergar, les correspondía a ellos. Y así fue, con ese sencillo razonamiento, como los argentinos se quedaron con estas tierras. Y claro, para justificarlo, decidieron enviar personas a este confín del mundo, donde las condiciones climáticas todo el año son durísimas y las comunicaciones (en aquella época), malísimas. Sólo podían venir por barco (el barco venía cada 2 ó 3 meses). No había aeropuerto ni carreteras. Así que las únicas personas que podrían venir a vivir aquí, serían personas enviadas, a la fuerza. Presos. Entonces se decidió la construcción de un presidio para los convictos más peligrosos. Aparte de alejarlos de la ciudad, los tendrían incrementando la población de este recóndito lugar.
La prisión tiene 5 pabellones. El pabellón número 4 es el de los homicidas, donde te cuentan la historia (espeluznante) de varios buenos hijos de puta que acabaron sus días allí. Un ejemplo es el del Petiso Orejudo, que se dedicaba a ahorcar niños de entre 18 meses y 5 años...Sus propios compañeros de presidio, le dieron una paliza mortal.
Bueno, no sólo fue eso lo que vimos. Las otras partes de la cárcel las han remodelado y han hecho unas fabulosas salas de exposición de arte y de animales disecados antárticos. También hay un museo naval dentro de la prisión, con una imitación del Faro del Fin del Mundo, que Julio Verne nos contó.
Para acabar, anoche probé la Merluza Negra, un plato muy típico de aquí, y realmente delicioso. Un abrazo para todos.
PD. Nos dijeron que se están avistando las primeras Ballenas en Península Valdés, adónde vamos mañana. Qué nervios.

viernes, 5 de junio de 2009

Destino: Ushuaia


Hoy toca día tranquilo. Tenemos hasta mediodía (aquí son las 9 de la mañana ahora mismo), así que aprovecharemos para comprar algún recuerdo tipo imán para el frigorífico.

A las 14.30 h. (hora argentina) saldremos para Ushuaia, la también llamada Tierra de Fuego.

Allí, según nos han dicho, hace bastante frío (grados bajo cero) y no sabemos qué tiempo nos hará.

Yo ya he optado por sentirme "en manos de Dios", cada vez que me subo a un avión. Y lo digo, porque es inevitable en estos días, ver la tele o leer la prensa, y no decir nada del Airbus de Air France. Sólo decir que me ha hecho pensar muchísimo sobre lo pequeños que somos y lo vanal que es nuestra existencia. Y si tiene que pasar algo, pues pasará. Nada más. Pero me voy a dejar de fatalismos, porque tengo que seguir disfrutando de nuestro viaje. La próxima vez que os escriba lo estaré haciendo al ladito de la Antártida, del Polo Sur. Parece mentira, tan lejos y tan cerca. Un abrazo.

jueves, 4 de junio de 2009

Los grampones

Los grampones son un calzado que se adapta a la bota de montaña, y que tiene pinchos en la suela, para agarrarse bien a alguna superficie helada, como es el caso de un glaciar.
Bien, hoy, segundo día de excursiones en El Calafate, hemos vuelto a navegar las aguas del Lago Argentino, pero tan sólo unos minutos, para llevarnos al embarcadero junto al Perito Moreno.
Allí nos han recibido unos guías que nos han explicado cómo se formó el Perito y como cada cierto tiempo se abre un boquete en el hielo, provocado por el nivel elevado de aguas en el Lago Rico.
Después hemos hecho un minitrecking por el lateral del glaciar. Nos hemos puestos nuestros grampones y hemos hecho una caminata de 2 horas, pasando junto a simas de profundidad considerable. Los guías iban delante y detrás, abriendo camino en el hielo con sus picos y comprobando que la superficie era lo suficientemente dura como para no romperse.
El remate final lo han culminado cuando nos han sacado vasos, una cubitera vacía y una botella de whisky junto con unos alfajores argentinos. Han sacado hielo directamente de donde estábamos pisando y nos hemos pegado un pelotazo allí mismo, a media mañana. Vaya tela. La verdad es que también hemos bebido agua de la que había en los pequeños laguitos formados en el hielo. Agua pura, fresca, sin bichos ni historias raras. Agua de glaciar, milenaria.
Así que nos hemos hecho fotos al derecho y al revés. Hemos pillado algo de sol (las caritas hoy están coloraditas) y de comer...perfecto. Anoche, cenamos bife de chorizo con setas (exquisito), empanadas argentinas, ensalada calafateña y una crema de zanahoria, regado con un buen vino (Santa Julia, cavernet), todo por 60 pesos argentinos cada uno (15 euros por cabeza). Una pasada. Una comida que en España, sería de restaurante carillo y saldría a unos 40-50 euros por barba, aquí vale 4 veces menos. El resto de las cosas no están tan baratas.
Bueno, mañana dejamos El Calafate y cogeremos (perdón nos montaremos, "coger" aquí está mal visto...), un avión hasta Ushuaia, la Tierra de Fuego, rozando la Antártida, el Polo Sur. Hoy hemos visto que allí están a -1 y -2ºC bajo cero. Ahora mismito voy a ponerme una rebequita...

miércoles, 3 de junio de 2009

47º - 51º, latitud Sur

Os escribo esto a las 17.10 horas en Argentina (las 22.10 h. en España), cuando acabamos de volver de hacer una excursión en catamarán por los glaciares y el Lago Argentino.
Hemos salido del hotel a las 7.30 horas. Nos recogió un chófer muy simpático que nos contó (medio dormidos), cómo se forma un glaciar, porqué Menem es odiado aquí o desde cuando los chilenos asfaltan sus carreteras.
Nos hemos embarcado en un catamarán con capacidad para un centenar de personas y hemos comenzado nuestro paseo (de noche) hacia los glaciares. Nos amaneció en el camino, recorriendo el extenso Lago Argentino que es increíblemente grande.
Hemos visto los tres glaciares: Upsala (a medias), Spegazzini y el clásico Perito Moreno. El Upsala, digo a medias, pues hace unas semanas, se rompió, y dejó unos cascotes de hielo flotando, que pueden ser como el Estadio Carranza de grandes, y no nos deja ver el fondo del glaciar ni tampoco aproximarse el barco.
Ha sido una visita muy bonita que hemos culminado con muchísimas fotos (ya las iré colgando, es que no tengo el cable para pasarlas aquí).
Esta tarde la dedicaremos a pasear por el pueblo, nuevamente. Y a buscar (qué tedioso) un restaurante para comer cordero patagónico como anoche. Nos dimos un buen banquete de cordero, patatas y panqueques con dulce de leche. Todo ello regado con buen vino de la tierra. Lo demás, no se puede contar. Un abrazo para todos.

martes, 2 de junio de 2009

La Boda y el Viaje

Queridos todos. Después de un largo tiempo sin escribiros y dada la dejadez a la que he sometido mi piedra cuadrá, voy a retomar en los próximos días estas líneas que internet me brinda, para contaros cómo nos va la luna de miel.
Sí, bien habéis oído. El sábado pasado, 30 de mayo, Mari y yo nos casamos, después de casi 11 años de noviazgo. Fue muy emotiva la celebración. Vino Pepe Nuñez, un salesiano que actualmente está entre Roma y Lisboa para casarnos. Y vinieron un montón de amigos de diversos puntos, fundamentalmente de Murcia, Barcelona, Madrid, Burgos y cómo no, los autóctonos de Cádiz.
Pues bien, ayer, lunes 1 de junio partimos del aeropuerto de Jerez (gracias Sergio por llevarnos) a Madrid. Allí tomamos el Boeing 747 destino Buenos Aires a dónde hemos llegado a las 5.40 de la madrugada (10.40 horas de España). En total, vamos, 12 horas de viaje que no se me han hecho muy largas. Dice Mari que mientras echaron la peli "Madagascar 2" estuve todo el rato dormido. Íbamos pegados a la clase Condor (primera clase), donde iba Leo Franco, actual meta del Atlético de Madrid, con su familia (por cierto, sus maletas tardaron más en aparecer que las nuestras). Y luego también se montó Aguirre, el argentino del Valladolid, que le marcó este domingo al Betis para descenderlo...
Pues sin salir de Buenos Aires, nos hemos desplazado a otro aeropuerto del norte para tomar otro vuelo de casi 4 horas con destino El Calafate. Aquí hace muchísimo frío (a 2-3 ºC, estamos) y hemos tenido que comprar alguna cosilla de abrigo para el trecking que hacemos pasado mañana por el Perito Moreno.
De momento ya he saboreado una Quilmes (la cerveza de aquí) y dentro de unas horas, cuando estéis dormiditos, me voy a cenar un buen asado argentino.
Mañana, toca navegación por el lago argentino y visita a los otros glaciares. Un besote a todos.

jueves, 14 de mayo de 2009

El desánimo del jardinero


Érase una vez un jardinero.

Aquel jardinero intentaba ser amable con todos los que lo rodeaban y no perdía la sonrisa fácilmente. Aprendió el oficio con dignidad y con muchas ganas e ilusión. Siguió formándose, pero poco a poco, la llama que prendía fuerte en su corazón y que hacía que todas sus plantas resplandecieran bonitas, un día, sin saber porqué, fue disminuyendo de intensidad.

Notaba como día a día cerraba su puño e intentaba derribar a golpes un muro de hormigón. Con la mano destrozada y ensangrentada, no notaba el dolor, puesto que era más la ilusión de hacer cosas la que hacía que se levantara todos los días a derribar el muro.

Y el pequeño jardinero, pobre imbécil se decía, se sintió sólo. Después de muchos tiempo, sólo.

No había sentido nada peor en su vida, que el desánimo. Después de unos pocos años preparándose para podar, para arreglar macetas y arrancar malas yerbas, estaba cansado de aquel jardín.

Las plantas eran ciegas y sordas a su trabajo. No hubo nadie que le rindiera un sencillo homenaje y que le dijera "qué jardín más bonito has formado". Y el pobre jardinero se sumió en una dura reflexión sobre si "podar árboles y arreglar macetas y arrancar malas yerbas" era lo mejor que podía hacer en su vida.

Un día, mientras volvía de trabajar, maltrecho y deprimido, y cuando estaba preparado para quitarse el uniforme y soltar las herramientas, volvió la vista a unas flores rojas, graciosas, redondas y frescas, que le saludaron al paso. Geranios. Carmencitas, las bautizó. Y viendo aquellas flores rojas comprendió que todo merecía la pena. Aunque tanto trabajara, y nadie lo viera, si él sólo podía disfrutar de aquella belleza comprimida en esos pétalos rojos, todo estaba en paz.

domingo, 3 de mayo de 2009

La Madre

A la mía.

Su vida empezó jodida.
El taxi giró en la gran vía a una velocidad de vértigo. El taxista no se podía quitar el susto de la cara y mientras agitaba nerviosamente un pañuelo blanco por su ventanilla, su mano derecha daba giros al volante con un exceso de habilidad y miedo, acojonantes.
En el asiento de atrás, La Madre se retorcía de dolor con cada contracción. Las piernas abiertas, las manos en las asas del coche. Lo único que le aliviaba era el traje rojo de seda que se había comprado semanas antes. Era ligero y suave.
Ahora había acabado de vomitar en el asiento, pero al taxista eso pareció darle igual, porque sólo le dirigió una fugaz mirada por el retrovisor.
- ¿Cuánto queda? - preguntó con el sabor ácido del vómito todavía en la boca.
- Usted aguante, señora. Por el amor de Dios, no deje de respirar. Aguante. - la voz le salía temblorosa. Como la de un niño que le cuenta a su madre que ha suspendido.
Justo a doscientos metros del hospital, ya supo que no llegaría. La cabeza del pequeño asomó entre sus piernas, precedida de un chorro de agua sanguinolenta.
De repente, el taxi frenó. El taxista paró el motor. La calle vacía, sólo para ellos. La Madre abrió más las piernas y con sus manos, nerviosas, comenzó a tirar de los hombros del pequeño, que salió deslizándose de su cuerpo. Todo se calmó. Todo se silenció. El taxi con las luces encendidas, era el único testigo de su venida. Y vino. A pesar de los pesares, allí estaba. A pesar de que su madre quedara en estado con dieciocho años y el padre pasara de Ella y de él, llegó. Llegó antes de tiempo. Pero llegó. Y en su cerebro, casi fetal, en sus neuronas, en sus conexiones sinápticas, se produjo la química. Se dieron las combinaciones necesarias para buscar dos palabras. Dos sensaciones que todavía no había aprendido. Y en su cerebro, casi fetal, apareció en forma de estímulos bioeléctricos y bioquímicos la combinación, "gracias Mamá".

jueves, 30 de abril de 2009

El negocio

Resulta bastante curioso la cantidad de masas humanas que se pueden mover convocadas por lo que unas ondas electromagnéticas propulsadas a través del aire son capaces de transmitir hasta una pantalla de televisión, justo a escasos centímetros de donde acaban tus pies, en el sofá de tu casa.
El sábado vi a Bisbal en directo. No me avergüenza decirlo, puesto que es un artista que -aparte del programa Operación Triunfo- se ha ganado su fama a pulso. Es un buen intérprete, tiene una buena voz, tiene mucho carisma y es cariñoso con su gran público. Con un puntito de "garrulo" que hace que parezca un tío con los pies en el suelo. Me gusta Bisbal.
Lo que no me va gustando nada es la fábrica de los llamados "triunfitos" actuales. Me da mucho coraje que haya un negocio oculto, detrás de las ilusiones de unos chavales que quieren, pues eso, triunfar. El programa, al cual he sido asiduo durante algunas temporadas, me parece que ha perdido mucho de lo que tuvo en un principio. Ahora la gente se conforma con escuchar las gilipolleces que el tal Risto suelta al final de cada programa. Y yo las veo, ¿eh? Para escribir esto, necesariamente las he visto.
Veo innecesaria la secuencia: hago un casting-te meto en el programa-me cachondeo de ti. Pero esto es negocio. Pasta. Billetes. Taco. Lo que menos importa en Operación Triunfo (OT, como dice la gente ahora) es el talento que aquellos Bisbal, Rosa, Chenoa y compañía derrochaban. Lo que importa ahora es ridiculizar a los concursantes. Eso vende más.
Y creo que los que más están haciendo el ridículo son Risto y compañía. Ellos solitos. Nadie más.

lunes, 20 de abril de 2009

Querer es poder


Al parecer el profesor Stephen Hawking está muy malito.

El hombre va a pasar la noche en el hospital que le toque (o el que pague) en el Reino Unido.

"Aunque había una nube sobre mi futuro, descubrí para mi sorpresa que estaba disfrutando la vida en el presente más de lo que lo había hecho antes. Empecé a avanzar en mi investigación". Fueron las palabras que él mismo citó cuando le diagnosticaron la Esclerosis Lateral Amiotrófica que padece.

La imagen que todos tenemos de él, es la de un tipo entumecido, medio recostado en una silla de ruedas ultramoderna y con una voz electrónica. Aquí os dejo una imagen que he encontrado de él y que me gusta. Es antes de su deterioro físico.

Pero es probablemente uno de los científicos contemporáneos más importantes. Quizá sea una prueba de que todos estamos en equilibrio. Lo que se nos da de sobra por un lado, por el otro se nos quita.

De cualquier forma, es la prueba, el Dr. Hawking, de que estando en una silla de ruedas, sin poder moverse, sin voz, tan sólo moviendo un dedo, se pueden remover hasta los cimientos de la ciencia. Querer es poder.

¿Qué no podremos hacer nosotros, que podemos movernos, tenemos voz y la suerte de vivir día a día? Todo podemos cambiarlo.

Que se mejore.

viernes, 17 de abril de 2009

Lo que sabe el patio del Pino


El patio del pino, sabe mucho. Tiene muchos, muchísimos años. El pino que lo corona, es alto como un edificio de 4 ó 5 plantas. El suelo, a sus pies, tiene las losas resquebrajadas porque las raíces ya lo infiltran todo.
Si el patio del pino hablara, hablaría de Campano, de Salesianos y de jóvenes. Hablaría de conversaciones importantes, de problemas y perdones. Hablaría de tardes soleadas y mañanas lluviosas. Y te susurraría al oído que ¡Cristo Vive! con la fuerza de tres mil cañones explosionando.
El patio del pino está en el colegio salesiano de Campano en Chiclana de la Fronter, Cádiz. Todos los años, mientras la semana santa andaluza da sus últimos coletazos, un grupo de tarados y soñadores llamados cristianos, nos reunimos en este agradable espacio para celebrar la Pascua. La fiesta más grande de la cristiandad. El hacer realidad en nuestras vidas, que Cristo Vive, que no murió en una Cruz. Que después de tanta mierda en esta vida, hay esperanzas. Hay algo más.
Y cada año alucino con la gente joven que acude a este tipo de encuentros.
Jóvenes que vienen a celebrar su primera pascua.
Por eso hace unos meses hice la promesa a María Auxiliadora, a Don Bosco, a mi familia, a mi novia, a todo el mundo y a Dios, de que siempre estaré al servicio de los jóvenes. Donde sea, cuando sea. Un "Sí" perpetuo.
Y cuando me rodeo de estos jóvenes alegres, con ganas de vivir, yo también tengo más ganas de vivir. Y soy más yo. Va con el carácter.
Gracias a todos.

jueves, 2 de abril de 2009

Una película de Ben-Hur


En homenaje a los misioneros salesianos,
que cada día que pasa, se dejan la piel a tiras
en los sitios más recónditos de este planeta.
Este relato que hoy os pongo está basado
en hechos reales, pero los nombres son invención así como la ciudad donde se desarrolla.
Va por ellos.


El Land-Rover pasó a toda mecha por la curva de aquella sabana, levantando una polvareda seca que ascendía hasta el cielo azul.

- Vaya sorpresa le daremos a los críos, MonPère - exclamó con entusiasmo el joven Julián.
- Pues sí. Y no sólo eso. Según me dijeron, en las cajas hay también polvorones de Estepa. No veas la que vamos a formar, comiendo polvorones en el Congo - reía Manolo, dando botes en el asiento con los baches del camino.

En su interior los salesianos Julián Pérez y Manolo López, madrileño y jiennense, se disponían a cruzar las aldeas periféricas de Goma, una ciudad del Este de la República Democrática del Congo.

Caía la tarde ya sobre Goma, cuando llegaron a La Misión, ante la mirada aburrida de los cascos azules de la ONU que vigilaban la entrada y salidad de la ciudad.

Una nave con muros frágiles de ladrillo y un techo de uralita, constituían el núcleo central de aquella Misión Salesiana. Igual servía de capilla, que de teatro o para resguardarse en los días -escasos- de lluvia. En los muros, según qué lado, se adivinaban balazos de recientes trifulcas y ataques enloquecidos contra todo y contra todos. Muy de moda en Congo. La otra parte, era una edificación más pequeña pero más moderna, que servía de casa para los cuatro salesianos y un cocinero que formaban la Misión de San Domenico Savio.

Al entrar por la calle principal de la ciudad, una legión de críos de entre dos y dieciocho años, se avalanzaron sobre el vehículo. Manolo tocaba el claxon, lo que divertía mucho a aquellos negros zumbones. Angelitos negros.

Poco a poco y con ayuda de aquella tropa eufórica comenzaron a bajar del coche cajas y cajas que habían ido a recoger a la oficina de correo. Las cajas venían de Andalucía, generosas donaciones ofertadas por antiguos alumnos y ciudadanos conmovidos.

Y en una de las cajas, la sorpresa. Una tele con DVD. Algo impensable para aquellos desheredados, olvidados de Dios. Todos los críos se acercaban y tocaban aquella pantalla de plasma con sus sucios dedos. También las moscas se unieron al festín y revoloteaban contentas alrededor de la misma.

- Habrá que hacer algo esta noche, Manolo - confesó Julián, completamente revolucionado por la sorpresa que había despertado en los niños, la existencia de un aparato plano con cables.
- ¡Mira esto! - decía distraído Manolo, mientras abría una de las últimas cajas. Era una versión de Ben-Hur, edición dorada, para coleccionistas. Venía en DVD y estaba sin abrir. El típico coleccionable de los domingos.

Dicho y hecho. Tras la cena (el que pudiera) y la oración, Manolo puso en marcha la motocicleta modelo Vespino R9, a la que conectó el generador de electricidad. Meses antes, los grupos de maï-maï (guerrilleros locales organizados como brigadas paramilitares de autodefensa), destrozaron el tendido eléctrico y con ello, las posibilidades de tener electricidad para "ocio" quedaron absolutamente reducidas al generador y a la motoVespa.

La tele se pudo conectar y un regimiento de unos ochenta críos se dispusieron alrededor. Los más pequeños, de uno y dos años primero, y los mayorcitos detrás.

Todos aquellos seres quedaron absolutamente maravillados con la sintonía de inicio de la película, pero como estaba en castellano, a la media hora se empezaron a escuchar ronquidos (de los más pequeños fundamentalmente) y una hora después, el 95% de la población del Congo residente en la Misión Salesiana de Goma, estaban dormidos.

Lo mejor aún estaba por llegar. A una hora prudente (sin ver el final y la carrera de cuádrigas), los salesianos creyeron conveniente apagar el invento y las madres se dispusieron a llevarse a sus críos. Pero claro, no había luz y encima todos eran negros. Pasó como otra hora entre que las madres se agachaban a intentar identificar a sus hijos dormidos, en el albero de tierra y piedras de aquel bendio cine de verano improvisado.

Mientras todos iban a casa, como banda sonora, de fondo, se escuchaban algunos tiros aislados.

martes, 31 de marzo de 2009

La música del incienso

Yo escucho de todo. Veréis, igual un día hago por bajarme un CD hiphopero de la Mala Rodríguez, que me meto entre pecho y espalda la 8ª sinfonía de Beethoven. A mí tanto me da.
Soy un musicófago. Ingiero (y digiero también) música. Por escuchar, escucho hasta a David Bisbal (que tanto le gusta a Mari...).
Ahora por estas fechas, que ya escuchar carnaval te da hasta yuyu, estoy enganchado a la música de semana santa. Sí, amigos. Soy un flipao de las marchas procesionales. Lo reconozco. Y no me disgusta nada. Al contrario. Es una preciosidad.
Para mí la semana santa es independiente del consabido e hipócrita dicho de "es que la semana santa es to los años lo mismo y el dineral que se gastan en los pasos y bla bla bla...". A mí me parece una exposición de arte y de folklore impresionante. Eso sin ser creyente. Teniendo fe, ya es otra cosa, pero no me voy a poner aquí a dar moralinas. Cada cual haga lo que le salga del níspero.
A lo que iba. Es una pasada estar en cualquier calle de Cádiz y verte un palio moviéndose con ese arte y esa gracia tan marinera. Oliendo incienso, escuchando el redoble de tambores de fondo y siguiendo con la vista cómo los cargadores van "bailando" la marcha procesional. No tiene desperdicio.
Y la música cofrade, es un género en auge. Son auténticas obras de arte musical al servicio del culto a la fe.
También hay quien la versiona, por ejemplo aquí os dejo el enlace de la página http://www.patrimoniomusical.com/ área de descarga, MARZO 2009), donde el Catedrático de Guitarra, don Rafael Moreno nos deleita en el concierto que dio en la Basílica de la Macarena hace unos días.
Incluso se ha llegado a utilizar en el cine. Si habéis visto "Alatriste", la escena final lleva por fondo los compases de "La Madrugá". Yo casi salto en el cine de la emoción, cuando la vi. Qué cojones tiene el Alatriste este..."Esto es un tercio español".

sábado, 28 de marzo de 2009

El poder del levante o de la levantera

El levante y el poniente son los dos vientos más preponderantes en mi tierra natal. Por un lado, el levante trae calor y mala leche. El poniente, fresquito y una rebequita.
La ministra de Igualdad se pondrá muy contenta de saber que en Cádiz (me imagino que lo sabrá, vamos) se puede hablar del LEVANTE o LA LEVANTERA (según Pedro M. Payán en EL HABLA DE CÁDIZ. Quorum Libros Editores. 6ª ed. 1993, "Levantera: intensidad moderada del viento de Levante").
Y este viento tan peculiar, hace que perdamos el coco, la chaveta, la chorla, con relativa facilidad. En Cádiz al parecer, todo el año sopla el levante, porque no nos enteramos de ná, como dirían esos "enteraos" del Selu, valga la redundancia.
En esta bendita tierra, nos comen la merienda pero, insisto, el viento de levante nos nubla la visión.
Me ha llegado hoy un correo electrógeno muy gracioso. Es un powerpoint con todos los enchufes alevines, de un partido político afincado años ha, en Andalucía.
Andalucía, para que lo entendáis, es su cortijo y ellos, los señoritos.
Pues bien me he quedado flipado viendo los currículums de esos chicos y chicas de mi edad, prácticamente, que con ayuda de un empujoncito del viento de levante, han ascendido escaños y peldaños, hasta llegar a puestos de cierta importancia en el Gobierno Autonómico.
Son esas cosas tan simpáticas que hacen que sonría y menee la cabeza cuando escucho a mi pueblo clamar que "Cádiz es de izquierdas". Pues muy bien. Ya veis, queridos paisanos, que mientras vosotros proclamáis vuestra aversión al pepeísmo de la Teo, vuestros hermanos de partido, se reparten cargos entre sus jóvenes hijos, mientras un montón de gaditanos están desperdigados de Nueva Zelanda a Fernando Po.
"Y como a mí todo me da igual, me colocó de Ministra de Igualdad"... No os perdáis esta chirigota de Cádiz llamada "Semana Cultural Versalles-Viña" y el repasito que le dan a doña Bibiana. Un pelotazo.

El video, bajado de YouTube, pertenece a www.muchocarnaval.com.

martes, 24 de marzo de 2009

El viaje de tu vida

En esta vida hay muchos viajes.

Para empezar, el que te regalan tus padres, cuando tú, siendo un vulgar espermatozoide, viajas hasta el útero para encontrarte con tu otro "yo", el óvulo.

Luego, están los viajes de fin de curso del colegio o el primer viaje en tren o en avión. O la primera vez que viajas en coche.

O el primer viaje que haces con tu pareja, a un destino romántico, dígase París, por ejemplo.

Y el viaje de la luna de miel, a un lugar exótico, recién casados.

Luego están los viajes de los amigos de toda la vida, que una vez al año se juntan y organizan un fantástico tour por España y Portugal.

Y el viaje con tus hijos a Disneyland o a Las Canteras de Puerto Real.

Probablemente algún día te despidas de tu hijo y te toque llevarle al aeropuerto porque de viaje se va, buscando curro a otra ciudad.

Para ir acabando, el penúltimo viaje. Ese que nos conduce a lo desconocido, de donde nadie vuelve. Al cielo si eres bueno, al infierno si malvado fuiste.

Y ya el último. El viaje que muchos no hacen porque no quieren o no pueden decidir. Un viaje que es casi tanto o más fascinante que el primero que he relatado.

Un viaje a distintos lugares en el mismo tiempo. A distintas personas en la misma noche. Estoy hablando de la donación y el trasplante de nuestros órganos, puesto que anoche mismo pude asomarme a uno de ellos. Es el viaje de un hígado, un corazón, unos pulmones, unas córneas, un intestino o unos huesos. Un viaje esperanzador.

Resulta curioso combinar en el mismo espacio y tiempo, dolor y esperanza. Donde unos sufren y lloran, otros lloran y esperan. Donde un niño aparentemente se acaba, otro niño comienza. Y todo esto gracias a la maquinaria de las unidades de trasplantes. Cirujanos y enfermeros que se ponen en marcha, viniendo desde diversos lugares, en avionetas, para recoger, mimar y viajar con el órgano deseado hasta el lecho de sus pacientes.

Es el mejor viaje que podemos hacer. El mejor viaje que podemos regalar. En una misma noche, una o varias personas pueden seguir viajando gracias a ti. Y eso, amigos míos, no tiene precio.

jueves, 19 de marzo de 2009

El Oscuro Poniente de Cádiz

Tumbado sobre la cubierta de la pequeña embarcación, notaba sobre su espalda el dulce golpe de las olas contra la quilla. Minúsculas, milimétricas, gotitas de agua del mar iban salpicando su cara y su pecho, refrescándolos. Su tez morena y su barba de muchos días, tenía el salitre reseco en la superficie. Hannón era un hombre de unos cuarenta años, con pelo castaño corto y una musculatura descomunal para la baja altura que poseía. Sus compañeros de embarcación se reían de él, a menudo, debido a ser el capitán de navío más bajo que existía en todo Tiro. Pero le respetaban y temían como a una vara verde.

Alguien gritó una orden y la embarcación viró al unísono unos veinte grados a estribor. El viento soplaba a su favor. Melkart había sido generoso con ellos porque habían hecho un sacrificio con palomas en la costa africana, durante unos días antes.

No era un secreto para nadie, el hecho de estar surcando unas aguas desconocidas. Aguas en las que nadie se había atrevido a navegar. Monstruos marinos y el fin del mundo amenazaban con recortar sus vidas más de lo normal.

Pero Hannón era un jefe con dos cojones. Nadie ni nada le hacían temblar.

- El mar, aunque hagas las cosas bien, siempre te acaba comiendo - solía decirle a sus marineros.

Siguieron adelante porque, entre otras cosas, había pasta de por medio. El faraón Necao había prometido un buen pellizco si lograban encontrar Tartessos, la tierra donde el oro y la plata no tenían fin.

El viento había cambiado, y eso hizo presagiar a Hennón que pronto deberían tomar tierra para no tener que navegar de noche, puesto que en esa época del año no era peligroso la navegación diurna, en unas aguas tan poco transitadas.

De repente, Eleazar, uno de sus marineros más jóvenes, gritó algo ininteligible. Eleazar vigilaba la proa y todo lo que hubiera flotando o a lo lejos. Al repetir el grito, ya logró entender lo que decía. Tierra. A la vista.

Efectivamente, a lo lejos, una bruma negruzca, azulona oscura, que a cualquier humano le hubieran parecido nubarrones muy bajitos, a Eleazar (que tenía un olfato marino fuera de lo normal), le pareció, directamente tierra. Manda huevos.

Hannón fue hasta la proa, mientras gritaba a los remeros, dos filas de veinticinco a cada lado de la pentecontera, que fueran dejando los remos tranquilamente.

No se distinguía bien esa supuesta tierra que el niñato de Eleazar había gritado a los cuatro vientos. Pero, diablos, probablemente lo fuera.

Se fueron acercando durante cuarenta largos minutos hasta una distancia de unos doscientos metros de la playa. Una playa vacía, desierta. El sol estaba ya casi al nivel del mar y empezaba a refrescar la tarde.

En un pequeño bote, llegaron a la playa y vieron que era de una arena exquisitamente blanca y fina. El azul del cielo era ligeramente diferente al que había visto en toda su vida de marinero. Y las aguas, también. Resplandecían con el brillo de los últimos rayos de sol.

Se sorprendió a sí mismo, sonriendo. Entornó los ojos, miro a izquierda y derecha, y a nadie vio en aquellas tierras lejanas. De repente, pensó en construir allí su recinto amurallado. Sí, aquella tierra tan bella, sería su resguardo. Gadir. Recinto amurallado.

En medio de la playa, rodeado de cuatro hombres, con los pies firmes en el suelo, miró al cielo y empezó a sentir que el viento había cambiado. Ahora soplaba, para él, el oscuro poniente de Gadir.





Tumba fenicia en la Ciudad de Kerkouane, con un fresco en su interior que representa una ciudad amurallada, que es justo lo que significa Gadir.
(tomado del blog: www.herakles-melkart.blogspot.com)

lunes, 16 de marzo de 2009

El arte de los muertos

Aunque me dedico (gracias a Dios) a los vivos, el mundillo de la muerte y todo lo que la rodea siempre ha despertado en mí una gran curiosidad.


Recuerdo de pequeño, cuando el Día de los Difuntos, nuestros padres nos llevaban al cementerio de Algar (Cádiz) para poner flores frescas y adecentar las tumbas de nuestros abuelos y tíos. Mientras tanto, los primos (ahora mismo recuerdo a Isabelita, a Miguel Cordón, a Leo Vallejo...), curioseábamos entre las viejas y destrozadas tumbas. Recuerdo que incluso encontramos una abierta y maltrecha, que dejaba entrever un cráneo seco y polvoriento. Cosas de niños.


Luego, las pelis de miedo. Que aunque ahora hace tiempo que no veo ninguna, siempre me han llevado al borde del "cague". Y las series: ahora soy un forofo de C.S.I. y no me pierdo un capítulo.


Y, por último, los años de carrera: las prácticas en cadáveres y como colofón, la asignatura de Medicina Legal y Toxicología impartida por el Dr. Romero Palanco, que acaba de fallecer hoy.


Un hombre educado y muy inteligente, que supo despertar en (yo creo que todos) sus alumnos una pequeña vocación de forense e hizo que una asignatura se convirtiera en inolvidable durante aquel año de sexto de Medicina.


Llenó sus clases de anécdotas y detalles que ni imaginábamos, como las diferentes moscas que se acercan a los cadáveres según el período de descomposición. Nos enseñó a leer huellas dactilares a analizar manchas de sangre y semen. Y aunque eso, a la mayoría, no nos servirá de gran ayuda, sí que sacia la curiosidad que anida en todo ser humano sobre todo lo relacionado con el ocaso de nuestras vidas.


Paradojas del destino, el Dr. Romero Palanco ha sido encontrado muerto en su despacho de la facultad. Él, que tantos escenarios de crímenes habrá tenido que analizar. En su caso, parece que un infarto ha sido el causante del fallecimiento.


Una lástima para la comunidad médica gaditana y para la Universidad de Cádiz, que pierde a uno de sus mejores (con diferencia) profesores. Profesor, con mayúscula. Descanse en Paz.

miércoles, 11 de marzo de 2009

La luna llena

Dicen que con la luna llena, todo se altera. Hay más partos, más suicidios, más violencia. La luna ejerce un poderoso efecto sobre el comportamiento humano, alterándolo inequívocamente.


Quizá por eso anoche un taxista jubilado de setenta y cuatro años, afecto de asma y con la sensación de que nadie le había hecho caso, cogió su revólver (encontrado durante sus años de profesión en Barcelona, y que alguien dejó olvidado en la parte trasera de su taxi), y disparó contra la médico que le atendió en el Centro de Salud. Resultado: un herido de gravedad y ella, muerta. Treinta y cuatro años, una niña de dos años y una familia missing.


Uno se va realmente cabreado cuando sale del médico y cree que no le ha hecho ni caso. O te toca una vieja doctora que pasa de ti y ni te mira a la cara mientras escribe tus síntomas, o te toca un niñato recién acabado, con el título sacado en una tómbola, al que sus nervios y sus formas le delatan una inexperiencia descomunal.


La gente agrede al personal sanitario y la sociedad se queda tan pancha. Y todo por el puro convencimiento de que "es que hay médicos que son para echarlos" o "es que las enfermeras tienen tela marinera".


Aquí no pasa nada. Pero si te cuento que la mayoría de los médicos (hablo por mi gremio), tienen que estudiar 6 años, más un año después para sacarte el MIR y luego otros cinco años más para una especialidad como Cirugía Pediátrica, por ejemplo, resulta que has estudiado más que cualquier madre o padre sabelotodo que te mira de arriba a abajo como si fueras un bicho raro.


Y si además resulta que tienes 6 ó 7 guardias al mes de 24 horas, pagadas peor que otros gremios (véase señora de la limpieza, véase fontanero, véase mecánico de automóviles... con todos los respetos).


Y si además resulta que no coges tu día libre, saliente de guardia, porque tienes que seguir atendiendo a la población y que dedicas parte de tu tiempo libre a seguir estudiando para mejorar tus conocimientos.


Y si además te cuelas con cuarenta tacos, dos niños en el mundo y sin plaza fija, con la inestabilidad de asumir que el día de mañana te pueden pegar una patada en la espalda y mandarte al carajo... Pues todo se complica. Pero eso la gente no lo ve.


Los médicos viven bien.


Esa es la opinión generalizada. Y por eso mismo vivimos tan bien, que no hay cuerpos de seguridad en casi ningún centro de salud y en hospitales, para velar por nosotros. Estamos vendidos. Y hoy, desgraciadamente, se ha vuelto a ver. Y no cito la cantidad de agresiones verbales y físicas que se dan a diario. Por eso mismo, vivimos de puta madre. Porque a estas horas, le están extrayendo los órganos para trasplante a una compañera que tiene cuatro balazos en la cabeza, y que no podrá ver crecer a su hija, ni su hija podrá verla envejecer. Pero, claro, los médicos viven bien.


La culpa al final va a ser de la luna llena.


martes, 3 de marzo de 2009

El Auténtico Kung Fú

¡Qué os voy a contar! Han sido unos carnavales excepcionales. El romancero en la calle ha estado muy bien. Hemos salido menos días debido a deberes laborales e incluso faringoamigdalitis inoportunas, pero los días que hemos estado lo hemos pasado, como siempre, a lo grande.

Me quedo con varias cosas:

- Lo primero, el ánimo y la proposición indecente de Mari, porque si no llega a ser por ella, no me pongo las pilas para escribir.

- Lo segundo, la ayudita y fiel colaboración de Ful, sin el cual no hubiera sido posible de ninguna manera salir este año. Has sido mucho más importante de lo que crees, querido amigo.

- Lo tercero, mi padre y sus cartelones, que espero haber estado a la altura de su arte como carpintero.

- Lo cuarto, la casa de la abuela de Mari, donde nos cambiamos y donde hacemos el último ensayito antes de salir. Es un pelotazo contar con una casita en pleno centro de Cádiz.

- Lo quinto, los libretos de Jose y COPIGRAF, que generosamente nos hacen todos los años.

- Lo sexto, la gente de la calle, que como todos los años, nos ha buscado (sobre todo, nuestros amigos, claro está) y nos han preguntado por aquellos Epi y Blas.

- Y por último, mi compañero de fatigas, Sergio, que este año, por séptimo consecutivo ha hecho que los carnavales sean de auténtica categoria.

Gracias a todos, porque hemos logrado llevar a la calle nuestro romancero y hacer reír a la gente, con EL AUTÉNTICO KUNG-FÚ.

viernes, 27 de febrero de 2009

El gato que cortaba chopped

La verdad es que estos monjes tibetanos con los que ando paseándome por el carnaval de Cádiz, no me han dado mucho tiempo para sentarme delante del ordenador. Bendito Carnaval. Bueno, bendito y maldito carnaval, que hace salir lo mejor y peor de todos nosotros. Pero esto es así y al que no le guste, que se quede en su casa.
He podido escuchar coplitas muy buenas en estas noches de gato pardo, NIKON en mano y oídos atentos. He escuchado también bastantes carcajadas de la gente, escuchando nuestro AUTÉNTICO KUNG-FÚ. Las fotos, os las pondré cuando acabe el carnaval.
Pero me alegra saber que Cádiz sigue siendo la misma. La misma que por las noches, en cualquier callejón estrechito, te canta las coplas cara a cara y se ríe de los infortunios y las miserias de aquí. La misma Cádiz, que por sacar un buen romancero, va levitando a medio metro del suelo y se olvida de saludar a los demás mortales, simples mortales. La misma Cádiz que te dedica una sonrisa anónima y clandestina detrás de un abanico de Versalles o la que con desparpajo te "manda al carajo" más pronto que un mixto.
Este es el paraíso. Pero el paraíso del carnaval. Por la mañana, el que se reía de los infortunios, se caga en las castas del autobus que llega tarde y es muy caro (0,98€). Y por la mañana, también el del romancero, comprende que es un Don Nadie y tiene que apechugar con la misma rutina de siempre. Y por supuesto, la señorita que te mandaba al carajo, ahora está elegantemente vestida detrás de una mesa plagada de papeles.
Como dicen LOS TRASNOCHADORES, "De noche, todos los gatos son pardos". Y si no que se lo pregunten al que me encontré el otro día en la calle Sopranis, detrás de una reja con la tiza en la oreja y cortando chopped de lata. Qué arte, Dios Mío.

lunes, 16 de febrero de 2009

Adán el Caradura y Evax, fina y segura

Fue nuestro segundo romancero. Lo recuerdo con gran cariño, puesto que fue el primero que llevamos al concurso oficial. Y no hicimos un mal papel. La gente se rio muchísimo, actuando en el rebosante (casi imposible vernos), teatro de la vieja Salle Viña.

Lo preparamos más a conciencia y tuvo un muy buen resultado en la calle. El cartelón estaba hecho (como siempre por mi padre), emulando el árbol del Edén, con una serpiente de cartón piedra que se salía y todo para fuera. Y los libretos eran muy cachondos, recortados en forma de manzana (vaya tela la pechá de recortar que nos dimos viendo la final en casa de Sergio...).

En la calle lo pasamos mejor que el primer año, porque además salimos más días (creo que sólo el primer y el segundo fin de semana) y tuvimos nuestro primer contrato serio en la Casa de Extremadura (fuimos generosamente obsequiados con embutidos de la tierra y bebidas a go-gó).


En fin, una experiencia inolvidable esto de representar a los Padres de la Tierra.

domingo, 15 de febrero de 2009

De Carnaval en Murcia y de Romanceros

Pasar el precarnaval en Murcia es algo a lo que nos hemos ido acomodando con el paso de estos años. Nos hemos resignado a no ir al concurso del Falla, como antiguamente, cuando era estudiante de Medicina y salía por las tardes de estudiar en la biblioteca, para ponerme en la cola de las taquillas y comprar unas entradas de Anfiteatro.

Pero mire usted, que aquí en Murcia hay gente auténticamente enamorados del carnaval de Cádiz. Tan enamorados que este año nos invitaron a Mari y a mí a un Certamen de Chirigotas que se celebra en Beniaján.

Cantaron cuatro chirigotas: una de Cartagena, una de Marbella, una de Beniaján y la de nuestros amigos de Molina de Segura (Vísteme despacio, que tengo risa). Una sesión que para cualquier gaditano sería un tostón (hablando con franqueza), a nosotros nos supo a Gloria Bendita. Gente de lejos de Cádiz, hablándole a nuestra tierra con una sensibilidad que daban ganas de darles un primer premio a los cuatro.


Incluso pudimos encontrar a un par de gaditanos entre las filas de la chirigota de Beniaján, que este año concursó en el Falla bajo el nombre de "Una chirigota de Cadi". Gente que, como todos, están por estas tierras ganándose el jornal.

Por eso me hacen gracia todos esos F.B.C. (Filosofillos Baratos del Carnaval) que enjuician y discriminan a las agrupaciones por venir de fuera, sin estar fuera, como estoy yo, apreciando el cariño que se le tiene a nuestra tierra por aquí.

Sin darse cuenta, los auténticos catetos son ellos mismos que no aceptan nada que no salga del auténtico chovinismo gaditano (véanse las crónicas del concurso, en los medios escritos más famosos de Cádiz...).

Por otra parte, decir que me alegra muchísimo que haya 21 romanceros inscritos para el concurso. Este año nos quedaremos sin ir porque, si Dios quiere, yo llegaré a Cádiz el viernes, siendo el concurso el dia antes. No pasa nada, en la calle nos veremos. También en Murcia está calando el veneno del romancero y este año mis amigos Ful y Pablo Martínez van a sacar un romancero (el primero que haya constancia en el carnaval murciano): "R3D2 y la madre que lo parió". Irán de auténticos robots aterrizados por error en Molina de Segura. Un disparate auténtico que no hay que perderse.

viernes, 13 de febrero de 2009

El coro de los niños

A estas alturas del Pre-Carnaval, ya he escuchado y leído muchas cosas. Compagino en estos días el arte de la cirugía, con el arte de hacer guardias y con el arte de preparar mi romancero y escuchar-leer lo que puedo del Carnaval de Cádiz.
Como agrupaciones, son geniales, auténticos pelotazos:
- Coros: EL CORO DEL FUTURO
- Chirigotas: Salón de Belleza "El tijerita", Los enteraos, Air con el carair carair carair las compañías aéres que tiene mi Cádiz...
- Comparsas: Voces, Los trasnochadores, La secta de los Carapapa.

Me quedo con la Secta de los Carapapas, porque es una agrupación que me cae bien. Especialmente bien, porque no tienen pelos en la lengua a la hora de criticar la de cosas absurdas que uno puede ver en nuestro carnaval.
En estos días me preguntan muchos murcianos "¿Qué, los carnavales de Cádiz qué, tiene que ser increíbles, no?". A lo que yo contesto con movimientos afirmativos de la cabeza, puesto que no os podéis imaginar la cantidad de gente que es capaz de preguntarte (al día) sobre este tema.
Ojalá pudiera llevarlos (como aquel espíritu de la Navidad), volando, a Cádiz, un sábado de carnaval y enseñarle los niñatos borrachos tirados por las calles con olor a orín y a rancio. Ojalá pudiera enseñarles la tramoya del Falla y que vieran los auténticos cuchillazos que las agrupaciones y los autores y los integrantes, se pegan por la espalda unos a otros. Ojalá pudiera enseñarles las catetadas que mi Ayuntamiento es capaz de hacer presentando el carnaval en Madrid con Ismael Beiro como signo y portador de la gracia de Cádiz...
Pero no.
De las últimas cosas que he tenido que leer es que EL CORO DE LOS NIÑOS, (El coro de los puretas, de forma despectiva, leí hace unos días en un foro), no vocaliza bien. El problema del Coro de los Niños es que (a pesar de ser coristas, y como tales, artistas...), son demasiado buenos para actuar en un concurso de pueblo, como es el nuestro. Tienen un popurrít polifónico, que hay escuchar para ver cómo canta un coro de carnaval del siglo XXI.
"Más que le pese a esos cuantos enfermos del carnaval. Y no soy de esos artistas que son tan gaditas, que se olvidan de vivir". Espero que eso sí lo vocalizaran bien.

sábado, 7 de febrero de 2009

Felipe el hermoso y Juana, loca por un trozo

Fue el primer romancero. En estos días no paro de pensar cómo se nos ocurrió salir así, con tan poquísima vergüenza. Recuerdo en la casa de una amiga, preparando el cartelón con Sergio, haciendo los últimos dibujos la noche del sábado de carnaval. El tipo lo pensamos de forma rápida, unos días antes. Iríamos de Felipe el Hermoso y Juana la Loca, venidos de ultratumba. Con caras blancas, pelucas y gafas de sol. Irreconocibles. Lo suficiente para hacer el candao y que nadie nos conociera.

En los próximos días intentaré hacer un memorándum de los siete años que hemos salido a la calle con nuestro romancero de carnaval. Y este fue el primero.

Recuerdo unas letras mu mal escritas, apenas rimaba nada. Pero recuerdo la risa de la gente que nos escuchaba. Recuerdo lo bien que lo pasamos con lo que los gaditanos que salieron aquel domingo de carnaval, se rieron de nosotros y con nosotros. El carnaval nos mordió. Y es un veneno fuerte. Un veneno que hay que probar todos los años.

Sólo salimos aquel domingo y no volvimos más a la calle en toda la semana ni al fin de semana siguiente. Pero aquel dominguito nos sirvió para lanzarnos al año siguiente y al otro y al otro.

Era el año 2002 y yo estudiaba 4º de medicina, me parece. A mis padres les pareció una locura. A mis hermanos, una inconsciencia. A Mari le dio igual.

Las letras de aquel romancero las perdí en la memoria de algún disckette de 3 y 1/2. Lo que estaba escrito en papel, también. Sólo me quedan unas fotos que alguien se encargó de hacernos.

En definitiva, primer año del romancero, mu poca vergüenza.

jueves, 29 de enero de 2009

Ojos en los dedos

Eso es lo que tiene el señor que ahora les presento. Lo conocí hace bien poco y desde entonces no paso un día sin poderlo escuchar y ver. Aunque él a mí no me podría ver. Y no porque le cayera mal, sino que el hombre es ciego. Pero no importa. Para lo que él hace, sus manos y su garganta, le bastan. Como sobran las palabras, os dejo con RAÚL MIDÓN. El video fue en su primera aparición pública en un programa americano de renombre. Impresionantes los falsetes y la velocidad a la que su mano derecha golpea para darle el timbre a las cuerdas.

martes, 27 de enero de 2009

984 kilómetros

Cuando cerró la puerta de su casa, volvió la cabeza para echar una miradita. Una mirada rápida, de reojo. Una mirada simpática y descarada, como ella. Supo que no volvería más a vivir allí, pero las puertas que se le abrían por delante eran muchísimo más atrayentes en ese momento de su vida.
Con la conciencia tranquila y las alforjas llenas de ilusión, se hizo a la mar y navegó los 984 kilómetros que separan una ciudad de la otra.
Las tormentas y los huracanes llegaron. Pero ella los pasó y los pasa de largo, pues es mujer de altos hornos, a la que dos gotitas de lluvia y un poco de viento no le hacen temblar. Y como en Million Dollar Baby empezó a ganar combates poco a poco. El día que conoció a su hombre supo definitivamente que los 984 kilómetros no los volvería a recorrer más a la inversa. Su lugar estaba allí. Su sitio estaba allí. Volvería a casa, pero casada.
Y de repente lo entendió todo. Entendió el porqué le sentaba tan bien el traje de gitana que su madre le ponía de pequeña. El roete y la peineta. La flor en el pelo. Todo. Entendió que el gaditano nace donde le da la gana. Y comprendió más tarde, que los novecientos ochenta y cuatro kilómetros son pura anécdota para ella. Porque ella ya lleva en las sienes más de tres vueltas al mundo (y las que le quedan). Así que comprenderán ustedes, que sólo esos kilómetros, 984, no son suficientes para separar Bilbao de Cádiz. Ella nació allá, pero es de aquí. Muy difícil de explicar. Un abrazo.

Mari y Óscar

lunes, 26 de enero de 2009

El concurso

En estos días que empiezo a seguir el concurso de los carnavales de Cádiz, me doy cuenta de que ya no es lo mismo. Mi padre, que en estos días anda por Murcia, esta tarde, creo, que se ha dado cuenta. Hemos puesto http://www.carnaval-tv.es/ y hemos dado un repaso a la sesión de ayer tarde. Y hemos visto y oído la comparsa LOS TRASNOCHADORES.
Eso hace unos años era imposible. Sin ir más lejos, el año pasado. Este año puedo ver y escuchar al mismo tiempo (aunque por internet y con cierto retardo), todo el concurso, gracias a Onda Cádiz Televisión. Y todo eso sin contar con la cantidad de páginas webs que guardan contenido "carnavalero" de otros años, letras, músicas, fotos...
Todavía recuerdo cuando me acostaba en la habitación con mi hermano y poníamos en la mesilla de noche que teníamos entre las dos camas, un transistor rojo, antigüísimo ya entonces (yo tendría unos nueve o diez años) y allí nos dormíamos escuchando NOS QUEDAMOS DE PIEDRA, LOS COMBOIS DA PEJETAS o el cuarteto EL VELATORIO. Nos reíamos mucho y de aquellas noches ya sólo queda la magia, el duende, que el Gran Teatro Falla desprende para todo aficionado al carnaval. Y aunque el carnaval sea a veces una lacra para el gaditano y para Cádiz, de la que me avergüenzo, sobre todo, cuando se trata de hacernos daño entre nosotros mismos. Lo mío es mucho mejor que lo tuyo. Yo soy un artista, tú no. Soy tela de gracioso, lo que tú haces es una birria.
Yo, del carnaval, prefiero quedarme con el transistor rojo de mi hermano y esas noches escuchando "El Falla" mientras estudiaba EGB, BUP, COU y la carrera. Y ahora que trabajo, también lo sigo. Por lo menos un poquito todas las noches. Aunque ahora el transistor es un portátil con las teclas gastadas.

NOTA: Por cierto, la foto que he puesto arriba, está hecha en una sesión clasificatoria en El Falla, en el año 2003. Tres jóvenes estudiantes de medicina que ahora se dedican a la Cardiología, a la Pediatría y a la Cirugía Pediátrica. La que hacía la foto era Mari, por eso no sale.